ONU calcula que 130 millones de latinoamericanos viven en situación precaria; al igual que un tercio de la población urbana mundial de los paises en desarrollo.
Uno de cada tres habitantes urbanos de los países en desarrollo vive en asentamientos precarios, con viviendas deficientes o fallas en los servicios de saneamiento y acceso al agua potable, denunció hoy la ONU.
La zona del mundo más afectada es África subsahariana, donde el 62% de la población urbana vive en chabolas, según el informe bianual del estado de las ciudades del Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (UN-Hábitat) presentado hoy en Río de Janeiro.
En el sur de Asia el 43% de la población urbana habita en viviendas precarias, mientras que en América Latina y el Caribe esta situación la padece el 27%.
En esta región los problemas más generalizados son el acceso al agua potable y a los servicios sanitarios básicos, dificultad que preocupa especialmente a la ONU en Guatemala, Haití, Nicaragua y Bolivia.
La directora de UN-Hábitat para América Latina, Cecilia Martínez, quien presentó el informe, señaló que en esta región el principal problema no es la pobreza, sino «el aumento de disparidad entre ricos y pobres».
«Hoy más que nunca está aumentando la disparidad, porque las áreas ricas se benefician más del crecimiento económico y atraen más inversiones que las pobres», comentó la funcionaria.
América Latina se situó como la región con mayores diferencias del mundo, con una nota de 0,55 en el índice Gini, el indicador más utilizado para medir las disparidades de renta, que utiliza una escala entre 0 y 1.
Martínez señaló que las grandes ciudades de Brasil y Colombia son las que tienen mayores desigualdades entre ricos y pobres. Las urbes de Argentina, Chile, Ecuador, Guatemala y México también están a la zaga y superan la «línea de alerta» de 0,4.
América Latina se situó, además, como la región más urbanizada del planeta, con el 77% de su población viviendo en ciudades, cifra que podría alcanzar el 85% en solo dos décadas.
Cuatro de las 14 grandes urbes del planeta están en América Latina (Sao Paulo, Río de Janeiro, Ciudad de México y Buenos Aires), según el informe.
En la actualidad, la mitad de la humanidad vive en ciudades. Se espera que la cifra alcance el 70% en 2050, si continúa la tendencia de las últimas dos décadas, cuando las ciudades de los países en desarrollo recibieron un promedio de tres millones de habitantes por semana.
África y Asia, hoy todavía continentes rurales, están experimentando una urbanización más acelerada, principalmente por los movimientos migratorios de ciudades pequeñas hacia las metrópolis.
La concentración excesiva de la población en grandes ciudades puede producir distorsiones en la economía y desequilibrios en la distribución de los recursos, alertó la ONU.
En América Latina también está ocurriendo el fenómeno del rápido crecimiento de urbes pequeñas y medianas, como el caso de la boliviana Santa Cruz de la Sierra, que pasó de 50.000 habitantes a 250.000 en menos de una década.
«El gran reto de las ciudades medianas es mantener el nivel de vida», explicó Martínez.
UN-Hábitat destacó en el documento la disminución de población en la mayoría de las ciudades de los países desarrollados y de los miembros de la antigua Unión Soviética.
El análisis también alertó sobre la amenaza del cambio climático y la subida del nivel del mar para las 3.351 ciudades costeras del mundo, que estarán expuestas al aumento de inundaciones. (EFE y UN-Habitat)