El precio de la vivienda libre tendría que bajar un tercio para poder venderse como VPO
Según la reforma del PEV, todas aquellas casas de menos de 90 metros cuadrados que lleven sin vender más de un año y no superen los nuevos precios máximos establecidos por el Ejecutivo podrán pasar a ser consideradas como protegidas usadas, por lo que su compra estará bonificada y llegará a más compradores potenciales.
Los nuevos precios máximos establecidos por el Ministerio de Vivienda para los pisos protegidos usados pretenden acabar con el fuerte stock de casas sin vender que tienen algunos promotores. Para ello, algunas inmobiliarias tendrán que rebajar sus precios un 35% de promedio en Madrid o un 38% en Barcelona.
Cuando los precios estén por encima de los nuevos baremos, el promotor que quiera acogerse a este mecanismo deberá rebajarlos. El problema es que mientras en unas zonas los descuentos a realizar serán fácilmente asumibles por las empresas, como en la ciudad de Valencia donde el descuento medio deberían ser del 5,5%, en otras grandes capitales como Madrid y Barcelona las rebajas tendrían que alcanzar el 35% o el 38% de promedio respectivamente.
Los cálculos realizados por este periódico se han realizado comparando el precio medio de la vivienda hasta ahora considerada nueva (con dos años de antigüedad) que publica el Ministerio de Vivienda con los nuevos precios máximos autorizados para esas mismas zonas.
Esto da como resultado que una vivienda nueva en Madrid a finales del tercer trimestre de 2007 (los datos de final del cierre del año se darán a conocer el próximo viernes) costaba de promedio 4.093,2 euros el metro cuadrado, frente a los 2.668,16 euros que podrá pasar a costar a partir de ahora con sólo un año de antigüedad, lo que significa un abaratamiento necesario del 34,8%. En el caso de Barcelona, la situación es muy similar, ya que en la capital catalana los precios de los pisos de nueva construcción alcanzan los 4.302,5 euros, un 38% por encima del nuevo límite establecido.
Distintos promotores consultados destacan que esta medida tendrá más efectos en aquellos lugares donde la distancia entre el precio de la vivienda libre y la protegida no sea muy amplia, ‘ya que es evidente que ninguna empresa puede asumir rebajas de esta magnitud, a no ser que se encuentre en una situación financiera muy crítica, de fortísimo endeudamiento’. ‘Donde mejor funcionará es, por ejemplo, en las ciudades de las coronas metropolitanas de las urbes, precisamente donde existen los mayores stocks de pisos sin vender. En zonas como Móstoles, en Madrid’, señalan en una inmobiliaria.
Fuentes del Ministerio de Vivienda sostienen que esta medida está pensada para que beneficie a corto y medio plazo a unas 50.000 familias que podrían ver cómo se solventa su problema de acceso a una vivienda a precio asequible.
Fuente:Redacción de Urbanoticias.